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Gracias por tu visita, los fics que se publican aquí son salidos de mi imaginación, con los personajes prestados de la gran Meyer… te agradecería que me avisaras si ves algún fic mío publicado por la web, eso se llama plagio y hay que combatirlo. Gracias!

Te toma muchos minutos leer un capitulo? Entonces puedes tomarte un minuto para comentar, no pido nada más. Escribe que algo dejas y lee que algo llevas.


Exótica, Capitulo 2: Solo Bella




Summary: Edward Cullen, era uno de esos hombres que creían que todo en su vida era perfecto... la mujer ideal, el trabajo ideal y hasta la familia ideal y que nada podía llegar a tambalear esa perfección. Pero en una noche con amigos una hermosa bailarina exótica le hace abrir los ojos.

Solo Bella


Oh por Dios, Oh por Dios, Oh por Dios…

_Oh por dios!_ gritó Leydi reflejando mi pensamiento cuando salí por detrás de la pista de baile, ella me alcanzó una toalla cual manager de un boxeador al salir del ring y la tomé para secar mi vientre y mi pecho, que estaban cubiertos por una fina capa de sudor. _¿lo viste?... Oh mierda Bella, obvio que lo viste, si le sacudiste las tetas y el culo en la cara perra!_

Reí negando con la cabeza mientras recorría el pasillo interno del club, hacia el vestidor común con otras bailarinas que por suerte no bailaban hoy. Jake, el dueño de Enigma, había acordado en que los viernes eran de Victoria, una bailarina de poll, los sábados eran míos y los domingos de Lauren, una cantante en potencia.

_Si lo vi Leydi, aunque nunca antes lo había visto por aquí. El baboso de su amigo estuvo gritándome durante todo el baile_ me quejé recordando al rubio que me veía como perro en celo.

_Si, es cierto, pero no puedes culparlo al pobre… mírate! Si al dios griego lo dejaste babeando y con razón… yo misma me volvería lesbiana por ti, por cierto tengo un didlo que puede servirnos a ambas en la mesa de noche_ me estremecí al ver la mirada de mi amiga recorrerme de arriba abajo, pero luego rodé los ojos cuando se echó a reír.

Leydi era mi mejor amiga y era todo un personaje, por sus venas corría sangre latina y bien caliente y mi vida sería un cielo oscuro y lleno de nubes negras rondando sin ella, ella era mi hermana del alma. A demás, era la hermana de Jacob, el dueño del club en el que cada viernes bailaba y gracias a ella había podido actuar en tan exclusivo lugar.

_ Te amo Leydi, pero sabes que prefiero un lindo pene duro y grueso para tener mis orgasmos, no una vagina, y no porque tenga algo en contra de la tuya… pero no, gracias pero no._

_Perra_ masculló ella fingiendo estar ofendida. Me comencé a sacar mi modelo de esta noche, mi amplia falda de seda rojo profundo y leopardo y mi brasier del mismo material. Mientras Leydi la guardaba en su bolso mega grande, yo iba colocándome mis jeans pitillo de cadera baja y mi remera de corte irregular que dejaba un hombro al descubierto, mis botas de tacón medio estilo tejanas y mi abrigo de cuero negro. _Vamos a tomar una copa antes de que te vayas bebé_

_Imposible cariño, mañana tengo cita temprano con los chicos para terminar un trabajo para el lunes._

_A la mierda con eso bebé, vamos a tomar algo y listo… a demás está ese bombón allí afuera ¿no quieres verlo nuevamente?_ su voz se esforzaba por ser sugerente, pero con ese ligero acento latino que tenía me hacía sacar risas.

_Sé que debe estar allí, pero Ley… solo fue un cliente, ya está, ni idea de quién es, no me interesa, sabes que no quiero tener nada con nadie ahora mismo, no puedo permitírmelo… así que deja de insistir, a demás, no puedes querer conocer a alguien solo por lo muy guapo que se vea… ¿y si es un pervertido? ¿un psicópata? No por nada no podía separar sus ojos de mí, a demás parecía muy grande para mí._
_Oh por favor! Tienes 20 años no 15! A demás no puedes culparlo, ningún puto hombre en ese salón podía despegar sus ojos de ti, ni siquiera yo podía! Y nena… mañana es domingo por la virgen santa, ¿en serio tienes que estudiar?_

_Si… el domingo es el único día en que mi grupo de estudio tiene libre._

_¿Y por qué diablos no les dijiste que tú trabajas todos los putos días sirviéndole a niños ricos y vanidosos en el restaurant y que encima de eso, bailas los sábados a la noche y ensayas todos los días y a demás!_ remarcó con énfasis _estudias en la universidad todas las noches, cielo santo… que el domingo es el único puto día que tienes para dormir a pierna suelta_

_Será este domingo nada más…_ dije cansada de discutir lo mismo con mi mejor amiga, está bien, ella se preocupaba por mí, pero eran mis responsabilidades y no iba a dejar de cumplir con ellas solo por unas horas de sueño.

_Está bien… mierda, me debes un tequila_ me señaló con un dedo y se montó su bolso al hombro _una botella! No un chupito_ remarcó, reí e hice lo propio con el mío y salí de ese vestidor hacia mi casa, sin antes darle un enrome beso en la mejilla a mi amiga.

_Sabes que te quiero Leydi!_ grité alejándome en el corredor hacia la salida trasera del club. Miré sobre mi hombro y mi amiga me mostraba su dedo del medio, lo cual me hizo reír.

Suspiré cuando me monté en el metro, mi casa estaba en los suburbios de la ciudad y recorría esa distancia todos los días para ir a la Universidad o venir a ensayar, por lo que estaba pensando seriamente en conseguir algo más cerca de la ciudad, para ahorrarme horas de viaje y dinero. Vivía en casa con mi madre y su nuevo marido Phil, el cual llevó a casa a vivir hacía casi seis meses y con el que estaba en plena etapa de luna de miel… y lo odiaba. En serio… alguien me de algún truco para evitar escuchar los gemidos de ambos mientras trataba de dormir para levantarme temprano al día siguiente.

Mi madre era de esas personas independientes y aventureras, era fotógrafa de corazón, era una artista… ella tenía el alma bohemia y libre y a lo largo de su vida había probado de muchas maneras exorcizar su espíritu a través del arte, finalmente se quedó con la fotografía luego de probar con la pintura, la cerámica, el modelado de porcelana y barro y era bastante buena. Había viajado a varios lugares del mundo a lo largo de su "carrera", testimonio de eso era el mural entero en casa que tenía dedicado solo a las fotografías de los lugares que ella había visitado antes de que yo naciera, como Egípto, Rusia, Cicilia y Marruecos… donde conoció a mi padre y se embarazó.

Si… mi padre era marroquí o al menos por parte de madre, que era una hermosa marroquí morena de ojos verdes, porque su padre era tan inglés como la reina Isabel y ambos vivían en Londres. Mis abuelos paternos que nunca conocí.

Él supo de mí cuando yo tenía diez años cuando mi madre le envió una carta con una fotografía mía en el interior mostrándole mi evidente parecido con él, morena y de ojos verdes como los suyos y contándole que a los dos meses de haberse venido de Marruecos, se enteró que yo venía en camino… bonita manera de enterarse de su paternidad. De todas maneras… él vino a conocerme, él ya estaba casado con otra mujer en su país y tenía otros hijos, por lo que luego de una visita de quince días se fue prometiendo mantener contacto y volver a visitarme cuando pudiera. Luego de esa vez solo vino tres veces más y solo seguíamos manteniendo contacto por cartas o llamadas telefónicas… él sabía perfectamente hablar en inglés, pues mi madre lo había conocido porque era el guía de uno de los museos más visitados de Marruecos.

Después de haberlo hablado con mi madre y mi padre decidí quedarme con el apellido que mi madre me dio, su propio apellido de soltera, no sentía que el apellido de mi padre llenara el vacio que su ausencia física y emocional había creado en mi vida por lo que el día que me lo propuso dije "Gracias, pero no"… me sentía de alguna manera leal con mi madre que había luchado toda su vida por ser madre y padre para mi.

Miré hacia la oscuridad por la ventanilla del metro, la cabina estaba casi vacía ya a las dos de la madrugada, solo veía algunos jóvenes que volvían a casa luego de unas copas en algún bar y algún que otro rezagado y solitario que iba a estas horas a trabajar. Mis noches de sábado eran así… hacía mi número de danzas árabes que había aprendido durante años de práctica, aprovechando mi apariencia exótica y volvía a casa para seguir con mi vida.

Era una estudiante promedio que pagaba sus estudios por sí misma, no toleraba que nadie gastase un solo dólar en mí, ni siquiera mi madre que exigía hacerlo por ser su obligación y por supuesto ni siquiera mi padre que osaba hacerlo para compensar los años perdidos. Mi meta era recibirme de periodista y con el tiempo abrirme paso en algún periódico local o hasta porqué no, nacional. Estaba enfocada en ello, mi trabajo de doble turno en el restaurant "Bellisima" en pleno centro de Chicago y mi baile los sábados a la noche eran imprescindibles para mí, para sostener financieramente mis estudios, mi madre renegaba de mis días lleno de trabajo al igual que Leydi, pero yo no podía quejarme, estaba en mi tercer año de Universidad y me iba muy bien, ya había comenzado con algunas prácticas en el diario de la Universidad y estaba feliz.

_¿Bella eres tú?_ mi madre estaba levantada por supuesto, su voz provenía desde su taller de fotografía… seguramente plasmando las imágenes que había sacado recientemente en papel fotográfico.

_Si mamá_ murmuré en voz baja, Phil debía estar durmiendo ajeno a las actividades nocturnas de mi madre. Me saqué mis botinetas tejanas en la entrada y las dejé a un lado de la puerta junto a mi mochila. _¿qué hiciste de rico?_ me fui hasta la cocina para hurgar en la heladera.

Mi madre apareció en la cocina oliendo a esos químicos que usa en sus rebelados, arrugué la nariz y ella rodó los ojos sacando una cazuela del refri,

_Carne al horno con papas asadas y… por aquí quedó un poco de ensalada_ mientras ella fue a la encimera a acomodar la comida en un plato yo tomé un vaso y me serví agua.

_Dame todo_ dije luego de calmar mi sed y sentarme frente al plato.

Eran raras las veces que compartía un almuerzo o una cena en familia con mi madre y Phil, el almuerzo lo tomaba en el restaurant y la cena… bueno, siempre picaba algo en la universidad o íbamos a casa de Leydi luego de clases, Sue… la madre de mi amiga era increíble cocinera y la verdad estaba aprendiendo bastante con ella, no es que mi madre no cocinara, se esforzaba por hacerlo por Phil, pero en serio… la carne estaba dura y las papas algo quemadas.

_¿Está bueno?_

_Buenisimo…_ dije con la boca llena masticando.

_¿Sabes? Phil viaja a fin de mes, jugará en Florida…_ sentí los dedos de mi madre acariciar mi cabello que caía sobre los hombros. _si las cosas van bien conseguirá un contrato por otros cuatro años_

_Que bueno_ tomé un sorbo de agua y seguí con la ardua tarea de masticar la carne.

_Si, el entrenador dice que su brazo sigue bueno, así que debería entrenarse arduo para conseguir esos cuatro años._

_Lárgalo mamá_ murmuré mirándola de frente y esperando a que continuase. Conocía a mi madre, ella tenía algo para decirme y no se atrevía a ello. Hice un gesto con mi mano alentándola a hablar…

_El contrato que posiblemente firmará… ya no será para jugar aquí, será para un equipo en Jacksonville, Florida._ asentí ante su mirada atenta y seguí comiendo. _hija…_

_¿Se mudarán?_ murmuré alzando una ceja. Por supuesto que se mudarían, mi madre a decir verdad había aguantado mucho tiempo en Chicago y sabía que lo había hecho en parte por mí, para darme un lugar fijo y seguro, un lugar al que llamar "hogar" y por supuesto no me molestaba que se mudaran, ellos debían inciar su vida junta y yo ya tenía 20 años, era hora de independizarme del todo de mi madre.

_Eso estamos viendo, quizá… no lo sé, puedas trasladarte a alguna universidad cercana…_

_Mamá_ dejé mi tenedor sobre el plato y me acomodé en la silla para tomarle las manos y hablarle de frente _yo me quedo, yo tengo mi vida iniciada aquí… o al menos la base, tengo a mis amigos, mi trabajo, mis estudios, no me quiero ir_ sonreí cuando vi la asimilación en su rostro _yo quiero que tú seas feliz, que salgas de aquí, vuelvas a viajar y a disfrutar tu vida con Phil, durante todos estos años vi cómo el deseo brillaba en tus ojos cada vez que no podías salir por no dejarme sola._

_Oh hija…_ una lágrima se deslizó por la comisura de uno de sus ojos y rápidamente la limpió. _no estaba segura de esto, le dije a Phil que lo hablaría contigo, Jacksonville queda lejos de aquí y tampoco quería dejarte sola_

_Estoy bien… vamos a estar bien. Leydi y su familia siempre estar presente, papá me llama esporádicamente y me dijo que tal vez viniera a pasar el verano, yo puedo viajar a verte y tu puedes venir de vez en cuando… estaremos bien_

_¿En serio?_

A veces mi mamá mostraba su lado inseguro y vulnerable, ella había quedado sola a los 18 años cuando sus padres murieron en un accidente de tráfico y desde ese momento tuvo que independizarse a la fuerza, ella me había cuidado y había hecho lo posible por hacerlo y que no me sucediera lo mismo que a ella le sucedió… pero ya era tiempo de cortar el cordón y que ella siga con sus sueños, los que se truncaron cuando conoció a mi padre en Marruecos.

_En serio_ dije con una sonrisa segura. _vamos mamá… Phil estará feliz de tenerte contigo, se lo mucho que se extrañan cuando están lejos. A demás… comencé con las prácticas de la Universidad, no me aburriré y sabes que con Leydi de mi lado ni loca estaré sola_

_Bien… entonces hablaré con Phil, él aún no firmó… se lo ofrecieron pero estamos esperando que venza el contrato aquí primero_

_Bien, sabes que tienen todo mi apoyo_ sacudí su mano aún con sus dedos entrelazados con los míos, estaba feliz por mi mamá. Ella caminó por la cocina sacando el pote de helado del frigo, sacó dos cucharas y la salsa de chocolate, mi debilidad, lo colocó frente a mí y las dos clavamos las cucharas para comenzar a engullirlo.

_¿Cómo estuvo tu baile hoy?_ preguntó luego de saborear su parte de vainilla dejándome la de chocolate para mí.

_Mmmm… genial, en realidad como siempre… tienes que venir una noche con Phil, Jake le dará tragos gratis_

_Oh nena… y verte mover las caderas de esa forma mientras decenas de tipos babean mientras te comen con la mirada? Tendría que llevar el bate de Phil…_

_No seas exagerada_ reí comiendo mi helado. _en realidad me gusta bailar así frente a ellos, me siento como… poderosa _ empuñé mi mano.

_Obvio que si amor_ rió negando con la cabeza _a los hombres los tienes colgando de su dedo meñique mientras le muestres mucha piel y te les insinúes sexualmente_

Si supiera mi madre cuántos de ellos se me insinuaban sexualmente a mí, cuántos de ellos me pedían un baile privado, cuantos me deseaban a su lado para una noche… ofertas de ese tipo había recibido varias, pero siempre con un NO como respuesta. Esa era la única dificultad que obstaculizaba la carrera de una bailarina, los hombres creen que por el hecho de mover las caderas y el vientre sensualmente, pueden ofertar como si se tratara de una prostituta.

_Me iré a dormir mamá, mañana tengo que encontrarme con Jess, Áng y los demás… te quiero_ dejé un beso en su mejilla y puse mi plato y cubiertos en el lavavajilla.

_Te quiero igual hija, descansa_

Mi madre se quedó trajinando en la cocina y yo subí las escaleras con ganas de tocar la almohada y desconectarme del mundo. Había sido un día duro… desde la mañana en el restaurant hasta la tarde, luego ensayo en la escuela de danzas con Shaila mi instructora, luego una cena rápida en casa de Leydi para luego salir a "Enigma" y prepararme para dar mi número. Suspiré sacándome la ropa y dejándola por todo el cuarto, me desmaquillé oliendo mi cabello, me ducharía cuando me levantara y me dejé caer en mi cama debajo de las cobijas.

A penas cerré los ojos aparecieron en la oscuridad de mis pensamientos, el par de ojos verdes que esa noche habían atraído mi atención. El cabello broncilineo hecho un lio increíblemente atractivo en su cabeza, sus labios rosados y llenos y esa mandíbula, wwau… nunca había conocido a tipo con esa mandíbula, había hecho un gran esfuerzo en no tocarlo… una de mis políticas, no tocar bajo ninguna circunstancia a ningún cliente. Pero esos ojos… eran de un verde más profundo que los míos, parecía caerme en ellos y nadar, nadar en un mar verde.

¿Por qué había atraído mi atención al tal punto que no podía dejar de evocarlo en mi mente? Nadie había hecho surgir eso en mí, nadie había sido suficientemente llamativo como para plasmarse en mis recuerdos… pero él. Cielos, era un total y completo desconocido y no podía dejar de pensarlo.

Nunca lo había visto en el club desde que Jacob había abierto las puertas, ¿se convertiría en un cliente habitual?

Volteé mirando hacia el techo y abrí mis ojos aún con su mirada llena de deseo en mi mente, molestando… picándome…

Esas manos, empuñadas sobre cada uno de sus muslos como si estuviera haciendo un gran esfuerzo por no tocarme, sus ojos recorriendo mi piel, acariciándome con su mirada lujuriosa… Dios… si hasta había podido ver el bulto hinchado en su entrepierna, cubierto por la fina tela de sus jeans que por más oscuros que eran, no se escondía de mi vista.

Era consciente de las reacciones varoniles a la hora de presentar mis números de baile, pero nunca me puse tan caliente al ver la reacción de ese hombre en especial… ¿por qué?

Mierda…

Alcé mis piernas y las junté deseando fricción en mi entrepierna. ¿Por qué carajo un simple desconocido me había puesto así? Bueno… eso denotaba el hecho de que él no era un simple hombre.

_Mierda_ susurré volteando sobre mi vientre y tratando de dormirme, si seguía pensándolo iba a tener que tomarme mi ducha a las cuatro de la madrugada. Volví a cerrar mis ojos e imploré a quien fuera que me permitiera dormirme, pero no… no podía sacarme de la cabeza esa prominente erección debajo de sus pantalones.

Suspiré frustrada y levanté la cabeza, tenía que dormir mierda!...

Estiré mi brazo y abrí el cajón de mi mesa de noche, iba a tener que aliviarme y relajarme y de una vez por todas sacarme a ese espécimen de la cabeza! Tanteé en la oscuridad de la noche entre las cosas que contenía mi cajón hasta que encontré lo que buscaba, iba a tener que usarlo.

Recordé ese cumpleaños número 18 que pasé junto a mis padres y mis mejores amigos en casa de los Black, la adicta al sexo de mi mejor amiga, Leydi, me hizo poner de todos los colores cuando enfrente de todos me hizo abrir mi regalo, un didlo rosado que movía su cabecita y vibraba. No la perdoné por hacerme eso hasta que le di su primer uso, lo cual me dejó tirada en la cama por media hora hasta que recuperé mis funciones motrices. Ese didlo era poderoso… así que lo saqué de su escondite y lo metí entre las cobijas por debajo de mi cuerpo.

Recordé entonces a ese tipo, sus manos cielos… esas manos empuñadas con sus nudillos blancos, en verdad me hubiese gustado que me tocara, pero no en frente de todas esas personas, tampoco iba a dejar que me pagar un baile privado, en otras circunstancias quizá. En medio de mi baile frente a él tuve la extrema necesidad de montarme en su regazo y restregar mi coño en su gruesa erección, quería abrir el cierre de su pantalón y con curiosidad morbosa examinar cuán grande era y si era tan grande como se veía debajo de esos jeans.

Gemí cuando deslicé la punta del didlo en la hendidura de mi coño y lo encendí a modo vibrador… oh mi dios, cerré los ojos fuertemente sin dejar de pensar en ese tipo y ahora me lo imaginé con la camisa desabrochada tomándome de la cintura, sus labios llenos besando mi ombligo que estuvo por varios minutos en frente de su rostro… a centímetros…

_Ahh…_ jadeé sobre el colchón moviendo mis caderas, penetrando mi didlo aún más profundo, lo necesitaba más adentro. Moví mi mano haciendo círculos y abrí mis piernas apoyando mis rodillas sobre el colchón levantando mis caderas, entonces tuve lugar para penetrarme aún más hasta la base, oh si… podía sentir la punta movediza de mi juguete rozando mi punto g una y otra vez…

_Mierda_ gemí ahogadamente.

¿Lo vería otra vez? ¿sería tan valiente la próxima vez de bailar frente a él como lo había hecho esa noche? ¿sería tan imprudente y osada como para tocarlo?

Subí la intensidad del vibrador y casi salté sobre la cama, pero me aferré con mi mano libre a las cobijas y grité sobre el colchón, mi madre no oiría… si es que aún estaba en su cuarto de revelado. Mis piernas comenzaron a temblar y noté mis muslos bañados en mis fluidos, iba a venirme duro, lo sabía…

_Mierda, mierda, mierda_ susurré entre jadeos, sacudí mi cadera hacia adelante y comencé a montar mi didlo rosa, me incorporé sosteniéndome con mi mano libre sobre el colchón y tiré mi cabeza hacia atrás. Gemí suave cuando sentí mis paredes contrayéndose espasmódicamente, engullendo el juguete, ordeñándolo si fuese un pene de verdad. _Oh dios…_

Y me vine… fuerte, duro y poderosamente. Dejé caer mi cuerpo hacia adelante mientras temblaba descontroladamente, mis piernas no resistieron y mis manos tampoco, mis jadeos salían apurados de mis dientes aún con su imagen en mi mente. Mi didlo seguía vibrando en mi interior enviando remansos de placer a cada fibra nerviosa a cada poro de mi cuerpo, me sentí mojada… muy mojada, pero también jodidamente relajada.

Había cumplido mi cometido.

Saqué mi didlo de debajo de mi cuerpo y lo tiré por algún lado debajo de mi cama, mañana me encargaría de dejarlo listo para otra de estas noches donde el calor me invadía y solo tenía esa muy buena imitación de la cosa real para saciarme.

Me dormí con mis pensamientos en blanco y ningún sueño interrumpió mi noche.

A media tarde del domingo ya habíamos terminado con nuestro trabajo en grupo, teníamos todo listo para el lunes y al fin íbamos a poder descansar un poco, la entrevista al rector de la Universidad había salido muy bien y montar eso en una presentación había llevado su tiempo, pero había valido la pena cada desvelo y cada mínimo esfuerzo.

Tomé el autobús desde uno de los bloques donde vivía mi compañero de universidad hasta el centro de la ciudad, me bajé cerca del Millenium Parck y caminé por los senderos disfrutando del suave viento que corría a esa hora, había gente dispersa sobre el amplio terreno de césped verde frente a los escenarios del Pabellón de conciertos, me encantaba ir ahí los domingos… a veces iba a disfrutar de los conciertos que allí reunían a una multitud de personas, otras simplemente iba a disfrutar de un almuerzo tardío sentada sobre el césped mirando la gente pasar. Ese lugar tenía un algo especial y me sentía en paz cada vez que allí iba a pasar mi tiempo.

Me senté en el espeso césped un poco alejada de las personas y miré hacia arriba… me preguntaba ¿quién había sido tan ingenioso para hacer semejante obra arquitectónica? Era algo que se veía solo en la serie "Futurama" pero con el verde rondando alrededor lo hacía ver utópico y hermoso. Abrí mi mochila y saqué mi manzana para darle un mordisco y dejé caer mi espalda sobre el césped disfrutando de la música, alguna talentosa banda de rock estaba haciendo un cober de Stairway to heaven de Led Zeppelin y me puse a tararear con la canción.

El timbre de mi celular interrumpió mi relajante tarde luego de unos minutos, por supuesto era Jacob para darme un balance de mi buen número de baile la noche anterior.

_Jake_

_Bella… mi preciosa Sabella ¿en qué andas?_

_En el Millennium tomando aire fresco y disfrutando de buena música_ mordí mi manzana cerrando los ojos _¿para qué soy buena?_

_Mmmm para muchas cosas linda_ dijo tratando de sonar seductor. Pero ambos sabíamos que no caería en esa, Jake era un amigo, el hermano de mi mejor amiga y mi jefe… y sabía que adoraba que nos tomásemos el pelo así, si Leah se enterara… aunque creo que ella era consciente de que su novio era un eterno Casanova sin mucho éxito. Jake estaba muy enamorado de Leah, el pobre…

_Ya sabes mi respuesta a eso- dije con burla.

_Cierto…_ dijo resignado _llamaba para saber que harás para el sábado que viene ¿algo nuevo?_

_No lo sé Jake ¿por qué? Tengo que hablarlo con Sheila_

_Bien_ carraspeó y cuando Jake carraspeaba algo bueno se venía. _Resulta que anoche hubo un grupo al que le gustó mucho tu actuación, un grupo importante de empresarios, muy importante… así que estaba pensando en que hagas algo fulminante… o sea… si, increíble, quiero que te luzcas_

_¿Qué grupo es?_ me senté escuchando atenta a Jake… ¿sería a caso…?

_Creo que estaban sentados en la mesa dos, adelante… tú le bailaste a uno de ellos descaradamente, el pobre se fue con la calentura del siglo_

_Si… creo que los ubico_ dije con una sonrisa bailando en mis comisuras.

_Bueno… prepárate nena, quiero que el sábado lo des todo_

_Hecho!_ dije con una sonrisa que no cabía en mi cara.

¿El sábado iba a verlo de nuevo? Oh si….

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Si, si, si, si!!!

Aqui nenas, otro caí de Exótica para quienes les gusta leer en el blog. 

Gracias por seguir apoyándome y recuerden el concurso! Anotense, anímense, es hermoso escribir, vamos!!! 



10 comentarios:

bella rodriguez dijo... [Responder]

hay reine tres largos años esperando por ser la primera en que te deje comentario...
Y POR FIN LO HICE
esta maravillosa historia tuya la sigo desde FF, pero verla aqui el lugar en donde me siento y leo lullaby es un sueño echo realidad
cada linea que leo nuevamnete se siente como la primera vez, la misma sorpresa alegria ansias... todo
simplemte gracias por el fic y todo lo que nos das
te keyo muxo
besos!!!!

Elizabeth dijo... [Responder]

hola lu a mi también me gusta más leer en el blog porque la interfaz es más bonita y la letra cansa menos pero igual seguiré leyendo en ff cada lunes sin falta y los adelantos en el face y aquí los vuelvo a leer jejeje me encantan todas tus historias linda ya quiero leer el adelanto de ANTV....

flor dijo... [Responder]

hola!!!me encanta este nuevo capitulo...es maravilloso !!

Laura dijo... [Responder]

Estubo bueno esta capi asi conocemos un poco a Bella y su vida,se ve q le gusto al admirador del baile jaja,y lo mejor de todo q les va a bailar la proxima vez,uff q hara Edward cuando la vea muy caliente se va poner jaja,hasta el proximo capitulo gracias!

Anónimo dijo... [Responder]

¡¡NENA....ME MATAS CON CADA FIC NUEVO, DEFINITIVAMENTE ME DECLARO CULPABLE...SOY UNA SUPER ADICTA DE TODOS TUS FICS. ME MATO ESTE, SIEMPRE ENGANCHANDO DESDE LA PRIMERA LINEA. BENDICIONES..XOXO¡¡MADAMEJSWEET¡¡

Anónimo dijo... [Responder]

Hola por aqui.
Buenos ya sabes que sigo esta historia por ff y por aqui, aunque mi comentario aqui sera comedido no va aya a ser que meta la pata jajjaja

Me gusta este personaje de Bella que has creado. Y es bueno saber su punto de vista.

Un beso

Lumy Cullen dijo... [Responder]

Mi Lu me encantó conocer lo que penso Bella de él. Me encantó la amistad tan bonita que hay entre Jacob, Leydi y Bella. También me fasino conocer todo lo que Bella ha tenido que pasar para poder tener lo que tiene. ¿Qué pasará ahora en la actividad que la contratarón? El mejor regalo fue que lo publicaras aquí, lo esperaba super ansiosa. Ansiosa por conocer la continuación, Un abrazo y TQM!!!

PD: Aunque me tarde sabes que siempre me doy la vueltita por el blog y me alegra saber que te encuentras bien!!

Twilightmaniaca dijo... [Responder]

Sabia! Bella tampoco pudo evitar olvidar a Edward, como sera ese trabajo especial que le dijo Jacob por celular? Pronto, pronto lo sabre, jeje

Hermosa si tienes mas fics en fanfiction que no tengas aqui porfavor pasalos! Es en serio, yo con todo el gusto del mundo los leería

Tambien me dejaste pensando en eso que dijiste que la historia es narrada en el 2008, ya veré mas adelante porque

Te adoro hermosa! Ya lo sabes, no? Y si no lo sabias, pues ya te lo dije, jaja

belcullen dijo... [Responder]

Esta historia está muy caliente y yo la adoro

Anónimo dijo... [Responder]

Hola lu, me encanto este capitulo Bella lleva una vida bastante atareada y ahora le gusto Edward y parece que se repetira el baile para el , como estara edward un abrazo patricia1204